Reseña del cineforum que realizamos hace unas semanas en la facultad de filosofia y letras.
Si hablamos de series, este equipo británico sabe lo que se
hace.
Charlie Brooker, el creador de Dead Set: Muerte en directo
y How TV ruined your life es un experto en mostrarnos desde
diferentes ópticas los aspectos más oscuros y las situaciones distópicas que se
crean a causa de las tecnologías y de cómo el humano contemporáneo se enfrenta
a ellas.
Black Mirror es una miniserie de seis capítulos
independientes entre sí, cada uno de los cuales narra uno de estos “choques
tecnológicos”.
En su primer capítulo, The National Anthem, que formó
parte del Cine Forum de La Mecha en su programación de noviembre, se nos
muestra en un drama con tintes de humor negro cómo el secuestro de uno de los
personajes más apreciados por la opinión pública británica, la princesa
Susannah es seguido con gran interés, sobre todo tras hacerse pública la
inusual exigencia del secuestrador: para su puesta en
libertad, el primer ministro debe tener relaciones sexuales con un cerdo en la
televisión nacional.
Así, de forma acertada el creador invita a la reflexión sobre
los entresijos del poder: nos muestra la relevancia de los medios de
comunicación o la imposibilidad de frenar la información en la red pese a los
infructuosos esfuerzos del gobierno; pero también aborda otras cuestiones como el valor de la dignidad
humana, el deber de la figura pública o la existencia de una sociedad
deshumanizada y aletargada ante un degradante espectáculo televisivo.
En el debate que se desarrolló posteriormente se discutieron
las antes citadas cuestiones, sobre todo las relacionadas con los medios de
comunicación de masas, como pueden ser la posición de los mismos en la pirámide
social en la actualidad, ¿son tan solo una herramienta del poder económico y
por tanto fiel reflejo de sus pretensiones e intereses, o por el contrario
pueden resultar en ocasiones un arma de doble filo que provoque inesperadas
consecuencias?, ¿es manipulable de igual manera la información en internet?
Teniendo en cuenta el peso que la monarquía ostenta en la
sociedad inglesa ¿podría haber sido posible una situación similar en otro
país?
También resultó relevante para los asistentes resaltar la
carencia de empatía por el primer ministro y su mujer que la serie refleja
(quizás oscurecida por el esperpéntico chantaje al que se ve sometido el
personaje, pero que se deja entrever en los últimos minutos del capítulo, donde
se muestra que pese al buen resultado reputacional que tuvo el mismo, produjo
daños irreparables en su relación personal), así como el papel en principio
secundario que juega la mujer del primer ministro en la escena, pero que sin
embargo lentamente se va desvelando como la voz de la moral, la que incide
sobre las cuestiones más profundas, la que cuestiona más duramente la
integridad y la ética de las acciones que su marido se ve abocado a realizar.
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